Antes del café
Lo
que quisiera hacer entender, y hacerme entender en este texto, es que tienes
que ser un ejemplo, más ético que la sociedad en la que vives, priorizar y
entender que el número uno eres tú. Tener tus metas bien claras, pero tampoco
asustarte de no saber por dónde empezar a cumplirlas.
Quiero
emprender, quiero escribir, quiero ejercitarme, quiero ser feliz, quiero hacer
un cambio para la sociedad, quiero aportar vida a mi alrededor y sobre todo a
mí. Quiero y puedo. Y tanto quiero que ya lo soy, aunque aún no tenga todo.
Porque ya me visualicé, porque yo soy realidad y porque la vida es mía.
Empezar con pequeños pasos:
Empezar con pequeños pasos:
- Para de juzgar a la gente
- No permitas que los comentarios ajenos te hagan daño y afecten tus sentimientos y estados de ánimo
- Crea rutinas sanas. Realiza tres nuevas cosas cada mañana durante un mes. Regístralas, lleva una bitácora
- Prueba nuevas cosas
- Apaga el teléfono
- Fotografía solo lo que es real. Deja de pretender lo que no es
- Ponte a leer. Antes de poder escribir, tienes que aprender. No corras sin antes haber caminado
- No te obsesiones. Relájate. Hay cosas que no están en tus manos
- No te estreses, todo sucede por algo
- Exprésate. Borra esa barrera del no querer hablar de ti y solo escuchar a los demás porque sientes que es muy egocéntrico. Si no hablas, te lo guardas. Si te lo guardas, te ahogas tu mismo
- No te culpes precipitadamente. Date respiros. Tener un día malo, no es malo. Tener un día de descanso, es necesario
- Haz una limpieza de tu vida. Cosas materiales, sentimientos y acciones
- Viaja, retoma tu pasión por el día a día. Deja de justificar el vivir en ese lugar como el motivo del dejarlo para después. Conoce, date nuevos aires. Ábrete nuevas experiencias
- Deja de pensar tanto en el dinero, en el futuro y en el que dirán
- Ocúpate del ahora. Cuando logres hacer eso, lo demás se va a ajustar
- Para tu lapso de solitaria. Háblales a las personas que amas, sal por un café, visítalas. Preocúpate. Te ahorras muchas cosas estando sola, te da paz, tiempo contigo; pero todos siempre necesitamos un hombro para caer en el peor día, y unas manos que nos aplaudan en el mejor
- Escribe. Escribe. Escribe. Un párrafo, una hoja, 10 palabras, un te quiero. Escribe diario algo nuevo, algo que te haga feliz y te de vida
- Suelta el pasado. Ya es momento de perdonarte y mandar al carajo tu obsesión, masoquismo y frustración. Ya pasó, ya sánate
- Arréglate. “Natural” no significa desalineada. Natural significa arreglada a tu manera, a tus gustos y a la forma de querer ver la vida. Un día malo se puede arreglar con una actitud positiva tuya y créeme que como te sientes y ves por fuera hace la diferencia
- Despierta pensando “¿Qué es lo que voy a hacer hoy para ser mejor en lo que hago?”
- Sé paciente. Roma no se construyó en un día
- Medita. Se consciente de tu respiración. Toma 10, 20, 30 minutos al día para ti, para pensar en lo que quieres, en lo que eres; en ti
- Hagas lo que hagas, estés en el lugar que estés, da y se la mejor versión
Y así reproducir cada
uno de los 23 pasos anteriores semana a semana, multiplicándolos, tachando los
logrados, añadiendo los nuevos. Hacerlo, hasta darte cuenta que poco a poco van
a irte aclarando lo que quieres y ya eres.
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