Largo, pero real. Esta soy yo.
1:41 de la madrugada, el cuarto tiene una cierta mezcla de olores que me parecen inciertos de distinguir, debe ser porque el café que tomé y el olor del barniz blanco que decidí ponerme no combinan.
Domingo
loco, no puedo dormir. Tengo tantas melodías cantando en mi cabeza que empiezo
a creer que ninguna de ellas se mezclaran.
Solo
pienso en mí, que extraño, siempre escribo sobre lo que pasa, lo que vivo y en
su mayoría (por no sonar muy dramática) escribo de ellos, de todos esos amores.
La
verdad es que si quisieran leer escritos sobre mi familia, amigos u cosas que
me apasionan los podrían encontrar, pero me encanta ser algo melodramática y
contar sobre cada novela, cuento, leyenda, realidad o sueño de amor en pareja.
Cada
escrito tiene su sabor, con un poco de chispas del color del día en el que los
escribo, con un poco de glaseado del sentimiento por el cual estoy plasmando y
un poco de envase de la persona que a mi alma ha tocado.
Escribo
por motivos que probablemente ya habrán notado o que podrán saber si me
conocen.
1:50
de la madrugada, la pregunta del millón llegó a mi cabeza.
¡Me
hundí yo sola!, resulta que hay muchas cosas que jamás he dicho por las cuales
siento que muchas veces me limito a no tener lo que quiero tener.
Mujer
contra mujer y una de ellas se dice: Las cosas que jamás te he dicho son las
siguientes:
¿Cómo
puedo pretender que todo está bien, cuando en mi corazón no lo está?
Me
limitó a contestar y empiezo a distraerme con otras cosas buscando evadirme a mí
misma.
1:57
de la madrugada, la respuesta es sencilla. Nunca pierdo la esperanza aunque
sepa que ya no la hay, me gusta soñar y pensar que va a pasar. Me gusta esperar
por ese mensaje, por esa invitación a salir, por esa visita, por ese te quiero
aunque sepa que no existe ni un 1% de posibilidades de que llegue.
Lo
siento mujer, es una realidad que la esperanza es buena, pero a veces solo
envenena.
Tengo
otra: Odio el cinismo, lo no controlable, esas ganas de ver como algo te
fastidia porque realmente es fastidiable. Me molesta ver que existan pretextos
para hacerlo.
¡No
señores, no los hay!, al menos en mi mundo no existen. Que ganas de
complicar todo y dañar corazones cuando las cosas son tan sencillas.
2:02
de la madrugada, creo que estoy explotando.
¿Y
les digo algo?
¡Qué me importa! Soy negro y soy blanco, soy rosa y soy azul,
soy amarillo y soy verde, pero hoy, hoy soy todo junto, soy felicidad y amor,
soy frustración y enojo. Hoy soy la paleta completa.
2:06
de la madrugada, sigo observando cómo pasan los minutos para sonar más
interesante poniéndolos.
¡Tengo
una nueva!
Mi
paciencia no es buena, que digo buena, nada, mi paciencia es nada. De verdad
creo que la perdí en algún lado porque no puedo esperar por nada. Trato de
verlo positivamente como algo que me hace ir por todo, pero debo de aceptar que
eso a veces me hunde.
No
se si alguien alguna vez se haya puesto a reflexionar sobre ustedes mismos,
pero hace mucho no me costaba tanto escribir algo como lo estoy haciendo en
esta entrada.
2:10
de la madrugada, si no lo pongo no tengo continuidad.
De
las cosas que jamás me he y he dicho pero es obvio que si han leído algo de lo
que he escrito y si he sido consciente de lo que he escrito lo sé y lo saben,
es que mi corazón ha estado quebrado tantas veces que cuando realmente algo me
hace feliz y lo estoy disfrutando, no saben qué bonito se siente.
No sé
si han sentido lo que es que te rompan el corazón. Hipotéticamente hablando a
todos nos los han roto, cuando nos castigan, se nos pierde algo o fallamos.
Pero llámenme loca pero que te rompan el corazón, es literal. Claro
literalmente no se va a romper y no soy médico para saberlo pero se siente un
hueco tan horrible, una traba al hablar y un click en el llanto en el cual,
real, duele.
¡Soy
bien llorona!
Qué si el día esta gris, lloro por melancolía, aunque nada me
duela, que si el día esta amarillo, lloro porque me da alegría voltear a mi
pared y ver frases tan bonitas pegadas, que si algo me da alegría pura, cuidado
que mi risa es más llanto que risa, que si me tocan los pies, no lloro, me
convierto en agua y los pateo poquito.
¡No
los toquen, enserio si pateo!
2:18,
me reí poquito pensando en lo que escribí y pensando en que tal vez a nadie le
importe esto, pero dios, hace 37 minutos me sentía cargada de muchas cosas y
ahorita el vaso con agua ya se está bebiendo.
Yo
creo que en el mismo lugar donde olvidé mi paciencia se quedó mi orden. Bueno,
la mitad. La verdad es que de las cosas que jamás he dicho es que en cuestión
orden soy muy elitista. Mi ropa siempre, siempre estará doblada, pero la verdad
es que mi cama dos o tres días tal vez lo haga. Ni se diga de los platos
sucios, por mí que se queden sucios.
¡Ya
llegó otra!, no suelo ser grosera, pero a veces si puedo. Hablando desde la
perspectiva groserías, solo mi hermana menor me hace decirlas, no como insulto,
sino porque con ella tienen sentido. Fuera de eso, enojada, furiosa y
explotando siempre salen con mi mejor amiga y en mi cabeza.
Desde
la perspectiva directa e hiriente nunca lo haré. Cuento 3 o 4 veces en mi
cabeza en donde lo que he dicho ha herido a la otra persona porque mi
sentimiento de corazón roto, hueco en el pecho, ya no podía con tanto dolor.
Aclaro, no me estoy justificando, pero con sus excepciones, no quiero no
contestar o no decir lo que pienso porque me da miedo que cambien la visión de
mi.
¡Qué
tontería, lo sé! Siempre escribiéndoles que mientras estés bien contigo mismo
nada más va a importar, que vuelvo a aclarar, eso es totalmente CIERTO, me da
mucho miedo hacerlo, no porque no me guste ni no pueda, sino al contrario,
porque me da miedo que hacerlo vaya a afectar a secundarios.
2:28
de la madrugada, probablemente ya debería dormir, van dos días de desvelo por
mi gusto culposo de ir de antro, que bueno, en su mayoría es el de todo
adolescente (exageré), de todo universitario pero no quiero no terminarme el
agua de este vaso.
Esta
es buena, hombre, ponte loción. No existe ninguna mujer que se resista a eso,
no es cuestión de higiene, sino de permitir que no solo la memoria te
recuerde.
2:37
de la madrugada, podría contar muchas más cosas que jamás he dicho y cuestan
trabajo hacerlo porque sabes que no son cosas positivas, que son cosas que
probablemente hundan pero por mi cansancio y deseo de dormir pondré la más importante.
La
cosa que jamás te he dicho es, todo. No soy buena lidiando con mis pláticas
emocionales, me encanta ir de boca en boca aconsejando sobre la vida, alegrando
a los demás, apoyarlos, pero simplemente me cuesta tanto hacer lo mismo.
Volviendo
a una de las cuestiones, del porque hago esto de escribir, es porque de cierta
manera es una autoayuda a mi persona. Mi mamá siempre me está diciendo que si
me lo guardo me enfermo, mis hermanas se enojan porque no les cuento y mis
amigos, pues mis amigos saben lo que resumo.
Soy
un perico y a todos les cuento de mi vida, no me callo y me parece emocionante.
Pero siempre me trago lo que realmente me está tocando mi alma.
Yo sé
que eso es malo y estoy en un proceso de abrirme a hacerlo, pero les preguntaré:
¿Tu mayor defecto es capaz de ser revertido en tan solo un día? o más sincera
la pregunta ¿Tu mayor defecto en realidad es tan grande como te lo planteas?
Por
lo menos mi mayor defecto le ha dado vida a esto, a escribir cada suceso y a
que si bien lo he redactado y les ha llegado, mis sentimientos si puedan ser
contados, escuchados y aparentemente muchas veces retroalimentados.
"Algo
mejor siempre viene", una amiga escribía en un blog como esté y me dijo que
porque no trataba de sacar todo lo que llevaba dentro de esta forma, así que
puse blogs en google, y como buena persona floja apreté el primer link y comencé
a insertar mis datos.
Wallflower,
esa soy yo. No tiene nada que ver con la película de Emma Wattson sobre las
ventajas de ser invisible, porque en realidad no soy invisible. Ese es el
nombre de mi banda favorita.
¡Gusto
culposo y no tan culposo! Si quieren enamorarse de la melodía y letra de una
canción busquen "One headlight" de este grupo, súbanle y siéntanla.
(Mi canción favorita, parte de las cosas que jamás he dicho o tal vez sí)
"Wallflower",
flor de pared. Suena bonito, normalmente todas las flores florecen en jardines
o macetas. Yo quiero florecer en la pared.
Solo
faltaba un nombre para el blog, mi primer escrito real, porque debo confesar
que cuando era pequeña me gustaba escribir poemas acrósticos (que forman
palabras verticalmente con las primeras iniciales de cada renglón), pero eso
fue historia, si recuerdo uno, pero si lo pongo el niño del que estaba
enamorada a mis 10 años lo sabrá y no es buena idea.
Volviendo
a mi primer escrito real (está como borrador, porque hasta a mí me hace sentir
deprimida) sucedió una noche triste, en donde para que mi hermana no me viera
llorar, me encerré en el baño y me puse a escribir todo lo que sentía. Esté
escrito fue con el que abrí el blog y al leerlo me di cuenta que como me sentí
en ese momento, nunca me iba a volver a sentir. Que el dolor de ese día era
único e irrepetible, pero que las cosas habían cambiado. Ahora tenía dolores
diferentes, pero tenía sobre todo alegrías más puras y mayores.
Y de
ahí, Algo mejor siempre viene tomó forma, escribía cada 6 o tal vez más meses,
pero por los motivos de desahogo que lo hacía eso es bueno, en realidad no
sufría ni nada.
Meses
después me metí y me di cuenta que no quería escribir solo cuando algo me
dolía, si no que quería plasmar cuando algo me daba vida de igual manera.
De
las cosas que jamás he dicho es que pienso que en la vida siempre van a haber
bajas, pero es cierto todo lo que siempre escribo como los títulos lo dicen:
"Gracias por existir", "Queme y sane mi alma", "No hay
mal que por bien no venga", "Para cabrón, cabrona y media" (hago
paréntesis que sí, cabrona y media es hermoso en el contexto del
escrito),"Amor de miel y no de papel","Tiempo al tiempo",
"Y siempre estarás tú","Ella dijo yo tengo el mío",
"Me gustas, pero me gusto más así","De amor y otras
adicciones", "¡Claro que sabre que es él!", "El momento que
merece ser vivido","Así de golpe" y "Esto también
pasará" entre otros solo quiero proyectar que no porque algo malo suceda,
es el fin del mundo si no al contrario es la oportunidad de ser
diferente.
¿Quién
no amaría tener la oportunidad de volver a empezar y ser todo lo que siempre quiso
al igual que quién no amaría estar viviendo exactamente lo que lo hace pleno y
feliz y no cambiar absolutamente nada?
3:06
de la madrugada, Cómprate ambas, es fácil vivir, lo difícil es darle sentido a
eso.
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